El océano está enfrentando una crisis sin precedentes. Las altas temperaturas marinas, la contaminación y la pérdida de biodiversidad son solo algunas de las alarmas que suenan cada vez más fuerte, mientras el mundo se acerca al 2025, año clave para los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la ONU. A pesar de los esfuerzos, el ODS 14, que busca conservar y utilizar de manera sostenible los océanos, ha avanzado lentamente y es el menos financiado de todos los ODS.
Sin embargo, 2025 representa una oportunidad única para acelerar el progreso en la gobernanza, conservación y desarrollo sostenible de los océanos, con una serie de eventos y acuerdos internacionales clave. Estos son algunos de los aspectos más relevantes:
Protección de la Alta Mar: El Tratado de Alta Mar, firmado en 2023, busca conservar y gestionar de manera sostenible los recursos marinos en el 61% del océano que está fuera de las jurisdicciones nacionales. Se espera que este tratado sea ratificado por al menos 60 países en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos en junio de 2025 en Niza (Fancia). España ya lo ha ratificado, siendo el primer país europeo que lo hace.
Lucha contra las Subvenciones a la Pesca Perjudicial: El acuerdo sobre subvenciones pesqueras, adoptado en 2022, busca eliminar las subvenciones que fomentan la pesca ilegal y la sobreexplotación de los recursos marinos. A principios de 2025, 89 países habían ratificado el acuerdo, por lo que se requiere un esfuerzo diplomático adicional para alcanzar el umbral necesario.
Tratado Global contra los Plásticos: Con la contaminación plástica siendo una de las principales amenazas para los océanos - entre 8 y 10 millones de toneladas métricas de plástico acaban en el océano cada año, y los residuos plásticos representan alrededor del 80% de toda la contaminación marina-; el tratado pretende crear un acuerdo jurídicamente vinculante que abarque todo el ciclo de vida de los plásticos, desde su producción hasta su eliminación. Todavía existen desacuerdos entre países, pero esperemos que se avance en la creación de un tratado global vinculante para reducir la producción y eliminar las sustancias químicas peligrosas, ya que el tratado pretendía haberse concluido en 2024.
Minería de los Fondos Marinos: Las negociaciones sobre la explotación de minerales marinos continúan, con la Autoridad Internacional de los Fondos Marinos trabajando para establecer normativas que regulen esta actividad, evitando daños irreversibles a la vida marina. Las negociaciones no han llegado a un acuerdo hasta ahora, pero todas las miradas estarán puestas en Kingston (Jamaica) en julio, en la que los Estados miembros se esforzarán por alcanzar un consenso.
Pacto Oceánico de la UE: La Unión Europea está elaborando un pacto que promueve la gestión sostenible de los océanos, que será presentado en la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos, mencionada previamente, en junio de 2025 en Niza (Fancia).
Eventos Clave de Alto Nivel: Además de la Conferencia en Francia, tendrán lugar otras conferencias cruciales, como la Conferencia "Nuestro Océano" en Corea del Sur, el Congreso Mundial de la Naturaleza de la UICN en Abu Dhabi o la COP30 en Brasil, que reunirán a líderes globales para avanzar en los compromisos de conservación marina.
2025 es un año crucial para los océanos, no solo a nivel global, sino también en España, que se compromete a seguir avanzando en la sostenibilidad de su sector pesquero, como menciona la Estrategia nacional de Alimentación publicada el 6 de febrero:
hace unas semanas, que destaca:
Fortalecimiento de áreas costeras: Se está invirtiendo en la formación de profesionales del sector pesquero, incorporando avances tecnológicos y prácticas sostenibles. Además, se busca hacer de la costa un entorno atractivo para las nuevas generaciones, incentivando su participación en la pesca.
Sostenibilidad en la pesca: Se promueven prácticas pesqueras más selectivas y la gestión sostenible de los recursos marinos, con el fin de mejorar las condiciones ambientales de los hábitats. También se está impulsando la descarbonización de la flota pesquera mediante el uso de energías renovables.
Innovación y tecnología: España está apoyando la investigación y el desarrollo de técnicas pesqueras sostenibles, fomentando la colaboración con instituciones científicas.
Regulación y control: Se están fortaleciendo las leyes para garantizar la conservación y el uso sostenible de los recursos pesqueros, con un enfoque en la limitación de capturas y el establecimiento de vedas. Además, se están impulsando controles de calidad para asegurar la seguridad de los productos pesqueros.
Apoyo a la industria transformadora: Se están promoviendo iniciativas como el PERTE Agroalimentario, que apoya la modernización de la industria pesquera y la transición hacia una economía circular y sostenible.
Promoción y comercialización: Se están desarrollando estrategias para promover los productos pesqueros de España, destacando su calidad y sostenibilidad en mercados nacionales e internacionales.
Aprovechar las oportunidades internacionales y seguir implementando estrategias nacionales enfocadas en la sostenibilidad y la colaboración será clave para lograr un cambio transformador que beneficie a las personas, la naturaleza y el clima. La acción colectiva será esencial para garantizar que los océanos se conserven y gestionen de manera sostenible en este año decisivo.
Pero también es plausible que, si tomamos las decisiones equivocadas, dentro de cinco o diez años nos encontremos con el mismo tipo de conversaciones sobre los alimentos azules que estamos teniendo sobre cómo revertir el legado de la agricultura y ganadería industrializada, por eso pensamos que lejos de vernos abrumados por los grandes, los pescadores artesanales siguen estando muy presentes. Capacitar a los pescadores artesanales para que puedan alimentar al mundo de forma responsable es fundamental para un futuro sostenible de los sistemas alimentarios azules. ¡El futuro es ahora!
Commentaires